Es pesimismo nihilista. Todos lo hemos vivido; todos nos hemos sentido meros actores en una inmensa obra teatral del absurdo. Todos. Merece la pena vivir un día; otro, no. Porque cada día muero y cada día nazco. Y así eternamente. Cada día es diferente y cada día soy diferente.
2 comentarios
Carlos -
Merece la pena vivir un día; otro, no. Porque cada día muero y cada día nazco. Y así eternamente. Cada día es diferente y cada día soy diferente.
Andrés Garralda -